En el marco de la próxima licitación del transporte
público mayor en la comuna de Osorno, que considera una flota de 120 buses
eléctricos y 50 máquinas diésel de alto estándar, el Ministerio de Transportes
y Telecomunicaciones (MTT) inició la etapa de prueba de buses en las calles de
la ciudad.
Los buses estarán en circulación durante dos días y
contarán con carga en su interior para simular el traslado con pasajeros.
Asimismo, recorrerán trazados actuales y nuevas rutas trabajadas con la
información obtenida en los diálogos participativos que se realizaron en 2023.
El seremi de Transportes y Telecomunicaciones Pablo
Joost, llegó hasta el exterior de la Universidad de Los Lagos, para dar inicio
al período de pruebas.
“Estamos realizando estas
pruebas con el objetivo de evaluar los tiempos de desplazamiento, evaluar el
estado de la ruta, radios de giro, el comportamiento de las máquinas en cada
uno de los servicios, para determinar finalmente cuáles son los servicios que
van a ser cubiertos por buses eléctricos y cuáles son los servicios que van a
ser cubiertos por buses convencionales”.
“Pudimos verificar que tanto de ida como retorno se
generaba un consumo del orden del 5 % de la batería del vehículo y por lo tanto
esto es adecuado para la cantidad de frecuencia o de viajes que realiza cada
máquina durante el día”, expresó
Joost.
En las pruebas participan 4 empresas de transporte: BYD,
Grupo Cabal, Vivipra y Andes Motors que en total probarán 4 buses eléctricos por
las distintas rutas solicitadas por los habitantes de la comuna, a través de
jornadas de Participación Ciudadana.
Planificación de prueba de buses
El MTT generó recorridos para las pruebas en base a las
solicitudes de la comunidad, levantando datos relevantes para la operación,
tales como el kilometraje, tiempos de traslado, consumo energético, estado de
las vías y radios de giro, de manera de optimizar el uso de los buses.
Por recomendación de los fabricantes, los buses
eléctricos no deben circular en pendientes mayores a 20%, por lo que se hizo
una revisión de ellas en cada recorrido, de manera de cumplir con esa regla. En
este sentido, las rutas con pendientes mayores a 20% se probarán con buses
diésel.
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