Cada 25 de noviembre se conmemora el Día de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer, en honor a las hermanas Mirabal, quienes fueron brutalmente asesinadas por ser mujeres y haber luchado por sus derechos en la dictadura del dominicano Rafael Trujillo en 1960.

 

La Violencia contra la Mujer se define como "todo acto de violencia basado en la pertenencia al sexo femenino que tenga o pueda tener como resultado un daño o sufrimiento físico, sexual o psicológico para la mujer, así como las amenazas de tales actos, la coacción o la privación arbitraria de la libertad, tanto si se producen en la vida pública como en la vida privada”.

 

Estudios realizados por ONU mujeres demuestran que, en el mundo, una de cada tres mujeres experimenta violencia a lo largo de su vida, una de cada cuatro adolescentes es abusada por su pareja y cada 10 minutos un hombre mata a una mujer.

 

En Chile durante 2023, la Subsecretaría de Prevención del Delito registró 134.116 casos policiales por violencia intrafamiliar: 8 de cada 10 denuncias fueron ingresadas por mujeres y 8 de cada 10 agresores identificados son hombres.

 

Este 2024, se han registrado 36 femicidios consumados en el país y 252 femicidios frustrados. De acuerdo al SernamEG, las razones que motivan estos crímenes incluyen la negativa de la víctima a establecer una relación sentimental con el agresor, la violencia derivada de su orientación sexual o de una evidente subordinación en la relación de poder entre ambos.

 

Estos datos son desoladores y duelen de sobremanera al saber que nuestras voces han sido brutalmente acalladas y que los casos en vez de disminuir aumentan.

En nuestro hospital San José Osorno, casi el 80% de la comunidad funcionaria somos mujeres, esto nos ha motivado a trabajar en acciones concretas en la prevención y pesquisa de posibles casos dentro de nuestra institución.

 

Si bien la lucha no ha sido fácil, luego de 7 años de tramitación, este 14 de junio se promulgó la Ley Integral para prevenir, sancionar y erradicar la violencia de género contra las mujeres, que busca mejorar la respuesta del Estado frente a las diferentes expresiones de violencia que viven mujeres y niñas. Esto nos da una pequeña luz de esperanza, ante datos tan desesperanzadores.

 

La invitación para esta nueva conmemoración del día de la erradicación de la violencia en contra de las mujeres es a no cerrar los ojos, a visualizar cómo la violencia no sólo puede ser un actuar explicito, sino que también, la omisión nos hace cómplices al no denunciar lo que muchas mujeres viven diariamente.

 

Erradicar la violencia es tarea de todas y todos, nunca ha sido nuestra culpa, y lo más importante, no estamos solas, seguimos luchando por las que estamos y por las que ya no pueden hablar, ver ni pedir ayuda. No seas un número más, aún estas a tiempo.

 

Barbara Carabantes, Referente de género HBSJO