El Senador por la región de Los Lagos, Iván Moreira, integrante de la comisión de trabajo y previsión social, estableció “las líneas rojas” que no tranzarán en el marco de la discusión por la reforma previsional.

 

Lo anterior luego que la ministra del trabajo, Jeannette Jara, indicara que no cederán respecto al destino del 6% de aumento de cotización, insistiendo en destinar un porcentaje a un seguro social.

Para el legislador, la propiedad de los fondos previsionales, la heredabilidad de los dineros, el 6% a cuentas individuales y la libertad de los cotizantes de elegir el instrumento que administre sus recursos destinados a la vejez, son los aspectos que, a juicio de Moreira, son intransables.

“Si la postura de la Ministra Jara, el Partido Comunista y el Frente Amplio es no ceder ni empatizar con los deseos de todos los chilenos, no habrá reforma previsional. Y el culpable será el presidente Boric, que no se ha sabido imponer frente al Partido Comunista y a la izquierda dura. Los chilenos no quieren que aquellos que tienen manchadas las manos con corrupción en el robo del siglo a través de fundaciones, le vengan a administrar sus platas de las pensiones. Aquí hay cuatro líneas rojas que no cruzaremos, el 6% para la cuenta individual, propiedad, heredabilidad de los fondos y libertad para elegir. Lo que no va a ocurrir, señora ministra, es que no habrá en este gobierno reforma previsional por su culpa, la del Partido Comunista y Frente Amplio, que quieren estatizarlo todo, imponiéndo un ideologismo fracasado al presidente Boric. Para que nos entendamos desde ya, las cosas que queden bien claras, qué es lo que vamos a hacer, qué podemos ceder y qué no vamos a cruzar. Ninguna línea roja. Y la ciudadanía tiene que tenerlo claro. No vamos a ir contra el pueblo de Chile, que necesita que sus fondos sean de su propiedad, que sean heredables, que el 6% vaya directo a sus cuentas y que finalmente cada uno de los chilenos, pueda elegir. Y esa línea no la vamos a cruzar”.

El parlamentario por la zona aseguró que, si el gobierno no empatiza con los deseos de los chilenos, no habrá reforma previsional, culpando al Presidente Boric de no imponerse frente al Partido Comunista y la izquierda más dura, a quienes acusó de querer “estatizar todo”.