El encuentro se concretó en
el salón azul del Centro Administrativo Regional con la presencia del
Gobernador Regional Patricio Vallespin, el Asesor Nacional de la Oficina de
Asunto Religiosos y el Seremi de Desarrollo Social y Familia, además de
miembros de las comunidades de fe.
La idea fue reconocer,
fortalecer y capacitar a quienes hacen labor de primera acogida de personas
vulnerables de la región, sean estos nacionales o extranjeros, considerando el
crecimiento de la complejidad de los fenómenos sociales, donde se necesita un
manejo de herramientas especializadas y de un trabajo en red para asumir
plenamente la acción de apoyo.
El Gobernador Regional,
Patricio Vallespin, abordó la instancia comentando que “estamos lanzando a
nivel nacional un programa que es muy importante para hacer lo que siempre han
hecho las comunidades de primera acogida, que es recibir a las personas que
muchas veces, en el desamparo, en el abandono, la vulnerabilidad social, no
tienen muchos espacios donde recurrir, por eso, poder capacitar a estos
monitores que están en estas comunidades, en los barrios o territorios, siempre
escuchando, pudiendo a través de ellos canalizar el trabajo de las
instituciones públicas encargadas de estos temas, nos parece que es una muy
buena iniciativa”.
“Para nosotros es una gran
satisfacción encontrar la voluntad y la visión del Gobernador, de la seremi de
Desarrollo Social, entre otras autoridades, para este proceso de vinculación
desde un sentido positivo, es decir, reconocer que en nuestros territorios
están las comunidades de fe, activas en la solidaridad, en la capilaridad
social y que desde los servicios de Gobierno, podamos contar con ellos,
asociarnos para llegar mejor a todos esos rincones, valorar lo que ellos hacen
de manera espontánea y capacitarlos para que esa espontaneidad se vincule con
los servicios públicos pudiendo llegar más efectivamente a toda la
vulnerabilidad social que a veces en los rincones de nuestro territorio ni
siquiera la podemos ver”, dijo el
Director nacional de la Oficina Nacional de Asuntos Religiosos (ONAR) de la
Secretaria General de la Presidencia.
Complementó el representante
en la zona de la misma entidad, Miguel Linares, que “es importante recordar que
ya tenemos un avance muy interesante ya que las voluntades, las capacidades y
los equipos están, ahora solamente falta poner manos a la obra, hay mucha
concurrencia interesada en conocer que fondos, que proyectos se pueden
presentar y creo que, como bien decía el director nacional, las herramientas
son claves ahí para poder saber cómo hacer proyectos, como atender mejor las
necesidades o intercambiar información con los diferentes servicios para saber
en qué zonas hay necesidad que necesitan de manera urgente cubrirse y también
el elemento de la coordinación para que en caso de alguna catástrofe o
situación dramática las autoridades sepan con quien se puede coordinar para las
tareas”.
El Seremi de Desarrollo
Social y Familia, Enzo Jaramillo, se mostró “muy contento y también muy
conmovido por lo planteado, tener la posibilidad de reconocer a las iglesias
como comunidades de primera acogida es de vital importancia. Este trabajo
virtuoso que hacemos desde el Gobierno Regional, con la ONAR y el representante
regional de la oficina, es porque yo creo que desde la seremi también queremos
ser aporte y trabajar en conjunto. Hoy día queremos reconocernos, vernos,
escucharnos, seguir planteando ideas para el futuro”.
Más de 60 personas entre
pastores y laicos, participaron en la actividad que congregó a agrupaciones que
tienen vínculos con comunidades basadas en la fe principalmente de la Provincia
de Llanquihue. Pronto se realizarán las mismas instancias en Chiloé y Osorno,
en las que también se abordarán los beneficios que tiene para las
organizaciones de la región el Fondo Comunidad del GORE.
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