“Amigos y hermanos”

Sólo quiero agradecer por haberme permitido durante muchos, muchos años, ser el hogar de tantas hermosas aves, que con su canto, alegraban tu pasar.

Agradecer también por haberme permitido dar sombra y cobijo a muchos que pasaron, alguna vez, cerca de mí y que con un abrazo, me hacían sentir tan feliz de existir.

Vi nacer, crecer y volar a tantas hermosas criaturitas, que cuando despegaban el vuelo, probablemente, lo hacían esperanzadas en que, alguna vez, volverían al hogar que los había cobijado.

Las avecillas buscarán otro hogar lejos de aquí, lejos del mundanal ruido, al que yo sí estaba acostumbrado.

Ya no estaré más para mis amiguitos con los que me divertía tanto.

No escucharé sus risas, ni sus llantos.

Adiós y buena vida para todos.

Tu amigo, el árbol.

Red Ambiental Ciudadana

Osorno