Muchas veces los residuos de madera provenientes de
la poda representan un problema a hora de buscarles un destino final. La clave
para ello es implementar soluciones creativas que nos permitan aprovechar los
recursos con los que contamos para mejorar lo que tenemos.
Así lo entiende el Encargado de la Unidad
Hortofrutícola del Instituto Profesional Agrario Adolfo Matthei (IPAAM),
Patricio Arriagada, quien se refirió en esta oportunidad a la utilización de
mulch vegetal para el cultivo de hortalizas en suelo mattheíno, con ayuda de
los residuos de cortes de poda de frutales del huerto ubicado en el Centro
Productivo y de Práctica El Castillo del Instituto.
El mulch es una capa de material orgánico que se
produce a partir de la trituración de madera, el que se instala como cobertura
protectora para el suelo. Su utilización ayuda a proteger el suelo de los
cambios climáticos, y al mismo tiempo actúa como agente contra la germinación
de malas hierbas.
El profesional explicó que, “esta técnica se
utiliza en agroecología para evitar el crecimiento de maleza, mejorar la
humedad del suelo, y ayudar a mantener una condición de suelo favorable por los
efectos físicos y químicos que produce su uso. Mejora y estabiliza la
estructura del suelo, actuando como un amortiguador, reduciendo la compactación
del suelo favoreciendo la retención de la humedad. En verano, la humedad se
mantiene y, por lo tanto, con esta cobertura se ahorra agua”, señaló Arriagada.
Asimismo, mencionó que otro beneficio es su aporte
para la mejora de la biodiversidad del suelo. “El mulch ayuda también a
mantener una temperatura constante y garantizar la actividad de organismos que
ayudan a mantener el control de ciertas plagas en los cultivos”, dijo el
Ingeniero Agrícola.
Aprender produciendo
Al ser el predio El Castillo un recinto con
orientación docente, el Encargado de la Unidad Hortofrutícola recalcó la
importancia de formar a futuros profesionales y técnicos del agro con los
conocimientos necesarios para desarrollar sistemas y prácticas agroecológicas
innovadoras. Explicó que, para el cultivo de lechugas, acelgas y otras hortalizas
en uno de los invernaderos del Centro Productivo y de Práctica El Castillo, se
implementó este semestre la utilización de mulch. Señaló que al ser éste un
espacio de aprendizaje, se optó por cultivar hortalizas con mulch y otras a
través del sistema tradicional, “a objeto de que nuestros estudiantes puedan
ver las diferencias y los beneficios desde el punto de vista productivo entre
una u otra opción de cultivo. Además, nos interesa que los alumnos entiendan el
valor de la reutilización de residuos y la vean como una herramienta de manejo
sustentable. Una alternativa simple, de bajo costo, fácil de implementar, y una
oportunidad para quienes cultivan la tierra”, explicó el mattheíno.
0 Comentarios