“Mamá, cuando muera quiero donar mis órganos...”. Esa fue la intención que comunicó Pamela Toledo Ortiz a su madre después de ver por televisión un reportaje acerca de niños que requerían un trasplante de órganos. La niña de tan sólo 12 años había comprendido la importancia de la donación y no sólo eso, entendió que su deseo debía ser comunicado para poder ser respetado. Semanas después, la menor talquina sufrió un aneurisma cerebral que le provocó la muerte, esto lleva a sus familiares a tomar la difícil decisión de donar sus órganos. Fue ahí cuando el hermano de Pamela recuerda la conversación de días anteriores, siendo su madre quien finalmente honra y respeta la decisión de su hija, convirtiéndola en la primera donante de órganos pediátrica en Chile. Es en conmemoración suya y de las vidas que salvó con su valiente decisión, que hoy 27 de septiembre se celebra el día nacional del donante de órganos.

Desde el año 2010 todos somos legalmente donantes, a no ser que en vida se deje expresado lo contrario. Sin embargo, la piedra angular en la donación de órganos sigue siendo la decisión de la familia, la que se ve comprensiblemente influenciada por factores como el sufrimiento de perder un ser querido, mitos en torno a la donación y muchas veces la falta de conocimiento acerca de la decisión del potencial donante, y es precisamente en este último punto donde se debe reforzar la información.

El año 2019 Chile vivió un gran momento en cuanto a la donación de órganos e intervenciones, se realizaron más de 530 trasplantes gracias a 188 familias que dieron un sí a la donación. Sin embargo, esta alentadora cifra fue lamentablemente coartada el año 2020 por la pandemia, disminuyendo los dadores a 150 y las intervenciones a tan sólo 358.

El Covid-19 ha tenido un innegable impacto en la salud pública mundial, no sólo por la alta demanda de camas y el conocido colapso sanitario, sino también porque a raíz de la propia fisiopatología del virus se estima que a largo plazo aumenten los candidatos que se sumen a la lista de quienes esperan por un trasplante de pulmón como única alternativa de sobrevida, lo que sumado a la escasez de donantes en Chile hace muy incierto el futuro de todos estos pacientes.

Existen redes de información y un sistema excepcional en torno al procuramiento y donación de órganos y tejidos en nuestro país, por mi profesión he sido testigo de ello y puedo dar fe. Lo único que falta es conversar.

Desde hace tiempo mi familia sabe que mi deseo es donar todos y cada uno de los órganos y tejidos que puedan dar vida a otros. Y tú ¿ya lo pensaste? ¿Has conversado acerca de tus inquietudes y deseos en torno a la donación? El momento es ahora. Piénsalo, empatiza, conversa y dona.                

Katherine Uribe Muñoz

Enfermera Docente

Centro de Formación Técnica

Santo Tomás Osorno